EL PUEBLO, NO TIENE QUIEN LE ESCUCHE

 

Juan Ramón Martínez

 

 

La situación, es crítica. El pueblo carga sus sufrimientos y muy pocos les prestan atención. Los “sordos”, han construido un relato falso para engañarlo: hacen creer que, en el horizonte, siguiendo la ruta fulgurante de Cuba y Venezuela, dándole la espalda a Estados Unidos, el futuro será hermoso. Y si les dan el voto, en las próximas elecciones. Manteniéndose tranquilo, y sin reclamar. Cómo hasta ahora que, pese a las dificultades, --ante la inacción de los gobernantes y la falta de resultados--, muerde el freno a solas, enjugándose las lágrimas. Callado. No sabemos si por ancestrales compromisos con la raza; o, como efecto de un sistema educativo criminal que lo ha preparado, para obedecer a los caudillos. De repente, como estrategia de sobrevivencia, mientras prepara sus maletas para irse de este agujero amenazante, hasta los Estados Unidos. Sólo; o, en caravanas

Los políticos, ven para otro lado. No escuchan. No ven la pobreza; ni las lágrimas de las madres que entierran a sus hijos, impotentes. Confiando que Dios hará justicia, cuando se desocupe haciendo las tareas que, tanto irresponsable deja de hacer. Tampoco se interesan por los miles de desempleados. Ni por ayudar a los más dotados para el riego de la inversión, que montan iniciativas que crean puestos de trabajo; y con los salarios, frenan la pobreza. Y cuando las maquiladoras se van, creen que no tiene nada que ver con ellos. Tampoco reaccionan ante al caótico crecimiento de las ciudades, la falta de agua, la inseguridad y las enfermedades. No se impresionan por la pérdida del espacio público, tomado por el gatillo nervioso, urgido de sangre y de lágrimas.

Cuando los gobernantes hacen estupideces: ruptura con Taiwán, negociación de un tratado comercial con China, cierre de mercados de camarón en México; o la falta de respuesta del sistema eléctrico para atender la demanda de la economía nacional, hablan de otras cosas. Les llama más la atención los partidos de fútbol que la calamidad de los hospitales, que dan peores servicios que los de Gaza. Pocos están interesados en la garantía que los sistemas electorales respeten la soberanía popular. Conspiran contra Honduras. Comen en secreto en el mismo plato, para en el día, lucir como enemigos, cuando forman parte del mismo grupo de políticos que, no cumplen con sus obligaciones.

La democracia representativa no funciona bien. Los electores eligen a diputados que, en su mayoría, son obedientes de los caudillos. Les interesa sus propias cosas, especialmente la continuidad en las curules. Muy poco el bien común. El Congreso Nacional, no es el foro colectivo; ni el altar desde donde se vigila el futuro. En vez de órgano para controlar al Ejecutivo, es un sirviente del gobernante que, detrás de las faldas femeninas, hace barbaridades en contra el país. Tratando al pueblo como peones, sirvientes y esclavos.

Pocos diputados honran sus compromisos. La mayoría, son enemigos del pueblo, al que tienen engañado, mientras encienden velas aromáticas al caudillo, protegiendo sus familias, y a la tribu de sus amigos e incondicionales. El gobierno, es un botín para emplear a los que se portan bien; y para castigar a los que se atreven a hablar. Es, un gigante insoportable

Nasralla, protesta por todo; pero no tiene propuestas. Asfura, ingenuamente, cree que los que muerden el hueso republicano, cuando se llenen la barriga, se irán a echar pulgas a otro lado. Rixi Moncada, feliz gobernando desde fuera, distribuye el dinero público para comprar votos, convencida que todos los pobres tienen precio. Se burla de todos. Ofrece el modelo cubano y la destrucción de la democracia, como el pago por nuestra felicidad. Jorge Cálix, anuncia “comida” a los que el PLR, ha dejado fuera; pero no habla de lo que hará para mover las cosas que no funcionan. Maldonado, resiste las tentaciones, entre sus afectos por Mel y la obediencia al caudillo manipulador de su pasado. Ninguno, escucha el dolor del pueblo.

Están seguros que seguirá quieto, llorando a solas. Que nunca se levantará en contra de los irrespetuosos. Nunca se sabe, sin embargo. Nuevas ideas, nuevas voces, pueden sonar; y el pueblo, dejar de llorar y empezar a caminar detrás de un nuevo líder. Hay que tener fe. De repente viene en camino. Mientras dará la espalda a los que, nos han hecho daño a Honduras. Y, a sus aliados tradicionales.


Comentarios

Entradas populares de este blog

HONDURAS, EN GRAVES PROBLEMAS

ASFURA, A RENDIR CUENTAS

MEL, VÍCTIMA DE SU NATURALEZA