EL FORO: MIEDOS Y COMPLICIDADES

 Juan Ramón Martínez

 


Otro 28 de junio. Será usado para confirmar la capacidad de Mel, para salirse con la suya; y amedrentarnos. Como la mayoría tienen mala memoria, ha logrado un enorme éxito, presentándose como víctima, engañándonos cuando en realidad quien salió afectado fue Elvin Santos, cómo ahora lo hace con Jorge Cálix.  Mel es un chico, de húmedos pañales que siempre se sale con la suya. En el 2009, encontró quienes apoyaron, contemporizaran sus caprichos, mejorando las preguntas; chineándole con el embajador Lorenz. Que, además, días después que la justicia frenó sus excesos, fueron tras suyo, pidiéndole, que, les perdonara, porque no eran culpables, sino que los otros que nunca han entendido su “fuerza intelectual”, sus maravillosas visiones, para hacer de esta patria desgraciada, una verdadera nación, orgullo de todos.


Ahora, nuevamente, Mel quiere salirse con la suya. Está mejor posicionado. Tiene un Fiscal General a sus pies; una Corte Suprema sometida a los imperativos familiares; y unas Fuerzas Armadas que apenas, le hacen caso a la general Richardson, cuando les visita; o les llama. Las fuerzas de oposición, las ha cuarteado; y mediante el apoyo del “lado oscuro” – ahora parece dirigido por el mismo Dios que, imagina; y, decide desde las “oscuridades” el destino humano—tiene de rodillas al PL; y, extrañamente, por el ofrecimiento de no actuar legalmente en su contra, a Nasry Asfura que, en un realismo inesperado, usa la moral, para incumplir la moral; y, justificar, su papel de hombre sometido. Y, cosa que no había logrado el 2009, tiene el apoyo de los órganos electorales, especialmente el CNE y el RNP, en donde con el apoyo de Carlos Flores, ya puede anticipar los resultados electorales, por medio de los que, asegurar otro período para el PLR.


Pero, en al ánimo de calmarnos y buscar explicaciones racionales, nos permitimos recordar a los que están asustados por la reunión del Foro de Sao Paulo, que Mel, en el 2009, trajo a Chávez, Ortega, Evo Morales y oscuros dirigentes del gobierno cubano; y nadie dijo miedo. El venezolano, iracundo, desde “La Plaza de la Democracia”, nos ofendió, tratándonos de “pity yanquis”; e incluso se burló del anfitrión, apodándole “Comandante Vaquero”, con poca fortuna que, no ha tenido el impacto que los apodos creados por el talentoso poeta Roberto Sosa. Para suerte nuestra, ahora su comunidad de correligionarios está de retirada; y Nicolás Maduro rodeado de votos, amenazándolo que tendrá que dejar el Palacio de Miraflores, dentro de pocos meses.


Además, una épica pasada de moda, recurrentes refundaciones e interminables congresos donde sólo se debate la izquierda a sí misma, lo alejan no sólo de la gente afín, sino sobre todo de la juventud. Buscar la cacareada unidad de la izquierda es la principal de sus obsesiones.  Y la unidad no puede ser un fin en sí misma. Porque si lo es, pierde su efectividad y genera lo contrario de lo que se busca: el borrado de las identidades políticas, de la imprescindible divergencia y de los matices que son la base de una izquierda que quiere alcanzar y apelar a un electorado mucho más amplio. La unidad debe ser circunstancial y estratégicamente, la alianza en el reconocimiento y la convivencia de las diferencias” (Llilit Verstringe, Las Obsesiones de la izquierda y el Nuevo Frente Popular, El País, Madrid).


De modo que la reunión del Foro, aquí, no tiene mayor importancia. Si, la tiene, la integración de nuevo, de las fuerzas democráticas y la creación de un Frente Nacional Democrático que, como primera medida, recomponga las fuerzas; y, asuma la dirección de las instituciones electorales, frene la complicidad de la Fiscalía General; y, coloque a las Fuerzas Armadas en dirección al cumplimiento de sus deberes.


El PLR, tiene en Jorge Cálix, un incordio que intranquiliza a Mel. Él es la figura que no hay porqué debilitar, ofreciéndole candidaturas liberales. Mas bien, hay que recuperar para la democracia, a los diputados del PN; para que Asfura no pueda cumplir su tarea de sirviente de Mel. Y desde esa liberación, modificar los nombramientos de los órganos electorales, para que Marlon Ochoa, no ensucie la soberanía popular, Paola Hall, deje la deshonrosa complicidad; y, Brevé y Kattán, no hagan de la tecnología, una fuente de engaño ciudadano. En 1971, enfrentamos un problema similar. Liberales y nacionalistas se unieron. Honduras, salió adelante. Ahora, también, ¡podemos hacerlo!

Comentarios

Entradas populares de este blog

HONDURAS, EN GRAVES PROBLEMAS

ASFURA, A RENDIR CUENTAS

MEL, VÍCTIMA DE SU NATURALEZA